Estructuralismo y el concepto de espacio
A propósito de tristes trópicos de Levi-Strauss
Oscar Rhenals España
RESUMEN
v Referentes histórico y espaciales
Al
referirnos al estructuralismo como método de conocimiento empleado por algunos
científicos sociales y naturales. Es imposible sustraerse de realizar alusión a
su origen como método de análisis científico que se inicia a desarrollar en el
campo de la lingüística, es Ferdinand de Saussure con la publicación de la obra
“Curso de lingüística general”; Saussure
considera que la toda la praxis lingüística -hasta la llamada no verbal- es
susceptible de análisis por medio de categorías estructurales
de elementos diferenciadores entre sí, es decir, una palabra tiene su
significado no tanto a lo que se refiere sino porque su significado es único
en relación con otras palabras entre distintos grupos humanos.
Los
signos lingüísticos se encuentran en relación con los referentes -significado-
y la unidad léxica -significantes-, la anterior estructura dialógica se
encuentra relacionada por medio en relaciones binarias de oposición entre sí.
Como todo buen método de análisis social -científico-, se inscriben
detractores, admiradores y teóricos, estos últimos le imprimen nuevos elementos
prácticos sustratos epistemológicos, constituyendo todo un cuerpo
teórico-práctico verdaderamente interdisciplinario. Para el estructuralismo,
fue crucial la mediación del lingüista Ruso, Roman Jakobson, quien desarrollo
su contribución teórica gracias a la unión del estructuralismo y el formalismo
Ruso, pero, para este teórico poseen más importancia a los actos de habla
-comunicación- antes que a la díada signo-significante propuesta por Saussure.
Jakobson da mayor fuerza a la idea que la comunicación verbal consiste en un
entramado de seis niveles estructurales, relacionados y validados en el plano
social. Los factores que se incluyen en el análisis literario Jakobsiano son: hablante, oyente, mensaje, contexto, código y
contacto.
Ahora bien, ¿qué sentido tiene para la ciencias
geográfica, la alusión a histórica de dos exponentes del estructuralismo
literario?, en primer lugar porque es necesario identificar los espacialmente
el origen y desarrollo del estructuralismo como herramienta de análisis
literario hasta su posterior metamorfosis en un método de análisis científico
que busca identificar las estructurales culturales de la sociedad y en segundo
lugar, es grato ver que para estos dos científicos sociales el espacio geográfico era un tema transversal
a sus estudios y explicaciones lingüísticas, en Saussure la referencia es
clara:
“Hemos presentado hasta ahora la diversidad
geográfica en su forma ideal: a tantos territorios, tantas lenguas
distintas. Y teníamos el derecho de proceder así, pues la separación
geográfica siempre es el factor más general de la diversidad lingüística.
Abordemos ahora los hechos
secundarios que vienen a turbar esta correspondencia y cuyo resultado es
la coexistencia de varias lenguas en un mismo territorio”. (Saussure. 1945).
Saussure, reconocía la diferenciación espacial y
cultural entre los grupos humanos, como un factor diferenciador de las
diferencias lingüísticas, siguiendo con la idea de espacio como lugar fáctico,
este autor desestima el espacio como el causante de la polifonía lingüística,
en tonto es un convencido de que lo espacial por sí solo no produce acción
alguna sobre la lengua, para ello se vale de un ejemplo sobre el desembarco de
unos colonos a una isla y sentencia que con el solo desembarco, los colonos no
adquieren la lengua nativa, por el contrario se necesita grandes periodos de
tiempo para la asimilación del nuevo lenguaje por algunos de los grupos humanos
en relación. En suma en la estructura lingüística de signo y significante, el
concepto de espacio geográfico es un factor de primer orden a identificar en el
análisis estructural de la diferenciación, relación y creación de formas signos
y significantes lingüísticos, ya que como señala.
“Sean dos caracteres diferenciales b y c;
nunca se ha pasado del primero al segundo ni del segundo al primero; para dar
con el paso de la unidad a la diversidad hay que ascender al primitivo a, al
cual han sustituido tanto b como c; ése es el que ha dado lugar a las formas
posteriores; de aquí resulta el esquema de diferenciación geográfica, válido
para todos los casos análogos” (Saussure.
1945).
Es evidente la búsqueda de lugares comunes para la
desentrañar la estructura de las distintas lenguas existentes en un espacio
geográfico en el viven distintos grupos culturales.
Para Jakobson, la comunicación se realiza en
contextos diferentes he aquí la relación directa con el espacio, en tanto, el
contexto es una categoría preeminentemente espacial. El concepto de contexto en
Jakobson es una categoría estructural de tipo referencial, le otorga sentido a
una conversación determinada, por ejemplo si una persona da su opinión política
en un espacio atiborrado de académicos, no utilizaría los mismos términos que
si estuviese hablando para un público constituido por masas de partidarios
políticos, los tonos, los mensajes, los oyentes y los factores metalingüísticos
serian profundamente diferentes. En geografía reconocer diferentes contextos
lingüísticos, es identificar espacios construidos culturalmente, en las cuales
las correlaciones se dan de manera casi imperceptible para una mirada poco
entrenada en la identificación de las relaciones estructurales entre los actos
de habla entre contextos espacio-lingüísticos.
v El
estructuralismo en Lévi-Strauss
Durante la estadía en la ciudad de New York, conoció
al lingüista Roman Jakobson, quien fue fundamental en la construcción de sus
ideas sobre la antropología estructural, cuyas categorías de análisis son
esencia inspiradas en el desarrollo del estructuralismo propuesto Saussure y
posteriormente Jakobson, por supuesto, sin desconocer la influencia de la
antropología norteamericana, representada en la figura de Franz Boas y anteriormente Durkheim
y Mauss durante su formación Europea. En Lévi-Strauss, el interés por
investigar los modos de producción de sentido, con el fin de desentrañar las
estructuras relacionales entre los mitos de diversas sociedades indígenas de
América, encontrando patrones narrativos similares que daban un sistema de
homologación de los mismos, dando lugar a narraciones de significados culturales
de oposición binaria, por ello.
“Cultura un sistema de comunicación simbólica que se
ha de investigar con métodos que otros han utilizado más en relación con la
literatura, la política, los deportes o la filmografía, la clave para él estaría
en organizar datos sencillos del modo más simple” (http://www.monografias.com/trabajos62/malinowski-durkheim-levi-strauss/malinowski-durkheim-levi-strauss2.shtml)
Es así como el concepto de
grupo se eleva como unidad de estudio estructural y lo define como sigue:
“…grupo» no designa
el grupo social sino, en un sentido más general, la manera como los fenómenos se agrupan entre sí. Por otra
parte, de la primera sección de este trabajo resulta que las investigaciones
estructurales tienen por fin estudiar las relaciones sociales mediante el
uso de modelos”. (Lévi-Strauss. 1995).
Es consciente que dichos grupos no
desarrollarían sus relaciones de producción binaria de significados -relaciones
sociales- sin la existencia del espacio geográfico:
“Ahora bien, es imposible concebir
las relaciones sociales fuera de
un ambiente común que les sirva de sistema de referencia. El espacio y el
tiempo son los dos sistemas de referencia que permiten pensar las
relaciones sociales, tomadas en conjunto o en forma aislada” (Lévi-Strauss. 1995: 310).
En estos términos, el espacio, se convierte
en una entidad supra estructural en la dinámica teórico-práctica para el
estructuralismo antropológico y el estructuralismo en general, en tonto,
permite la realización y creación de significantes comunicativos -actos de
habla- de producción simbólica que se relacionan con sus opuestos en forma
binaria. Entonces, si para el estructuralismo -o post-estructuralismo-, el
espacio geográfico son los lugares de la superficie terrestre que posibilita el
desarrollo e intercambios lingüísticos necesarios para identificar las
estructuras sociales, políticas, religiosas y de poder entre los grupos
humanos, se estima que la geografía como ciencia esencialmente del espacio se
convierte para este método en un referente obligado ya sea fáctica u
omnipresente, Lévi-Strauss como Durkheim y Mauss lo reconocieron
públicamente
En lo concerniente al espacio,
Durkheim y Mauss han sido los primeros en describir las propiedades
variables que es preciso reconocerle para poder interpretar la estructura
de un gran número desociedades llamadas primitivas (1901-1902). Pero ellos se
inspiraron sobre todo en Cushing,
al que hoy se ha hecho moda despreciar. La obra de Frank Hamilton Cushing
atestigua, en efecto, una penetración y una invención sociológicas que
deberían valerle a su autor un lugar a la derecha de Morgan, entre los grandes precursores de las
investigaciones estructurales. Las lagunas, las inexactitudes descubiertas
en sus descripciones, inclusive el reproche que se le ha podido
hacer de haber
«sobreinterpretado» sus observaciones, todo esto se reduce a proporciones
más justas cuando comprendemos que Cushing no trataba de describir
concretamente la sociedad zuñi, sino más bien de elaborar un modelo (la célebre división en siete partes) que
permitiese explicar su estructura y el mecanismo de su funcionamiento (Lévi-Strauss. 1995: 311).
v Definiendo:
estructuralismo y espacio geográfico
Definir el
estructuralismo desde el punto de vista hermenéutico, no es una empresa nada
fácil de realizar debido a la amplitud epistémica que ha tomado desde sus
inicios como herramienta de análisis de la lingüística estructural Saussureana y
otros teóricos que han robustecido el estructuralismo como método de indagación
social, cuya premisa se basa en la inferencia de que toda actividad cultural
puede enfocarse como una ciencia con el fin de develar la unidad de cada
elemento constituyente de la estructura. Ahora bien, para Jean Piaget, el
estructuralismo:
“… es un sistema de transformaciones
que, como tal, está compuesto de leyes (por oposición a las propiedades de sus
elementos), y que se conserva o enriquece por el juego mismo de sus transformaciones,
sin que estas terminen fuera de sus fronteras… en resumen, una estructura
comprende tres características: totalidad, transformaciones y auto regulación ”
(Piaget. 1999: 6).
De esta
definición se concluye que el estructuralismo se compone un cuerpo de leyes que
se suceden entre sí por medio de la praxis cultural, es cuando suceden las
transformaciones o mejor validaciones teóricas, de esta forma, el
comportamiento epistémico estructuralista se transforma en una totalidad
regulada sólo por los limites de los actos de significancia en los actos de
habla y aunque teóricos como Saussure o Jakobson hayan conceptuado que el
espacio geográfico no es suficiente para detener las relaciones de
significancia y significante. Los geógrafos entendemos que la determinación del
espacio geográfico entre las culturas sí es un límite estructural, en tanto, es
el espacio como lugar donde se crean y recrean las interrelaciones culturales,
en tanto, que se transforman a través del tiempo en códigos estructurales con
significados comunicativos. He aquí, la importancia del ejercicio académico de
los profesionales en geografía en desentrañar la estructura, además de
representarlas visualmente por medio de mapas en los que se materializan
estructuralmente dichas interrelaciones. Ello es posible ya que durante la formación
profesional en geografía se entrena la mirada para abordar problemas propios del
espacio.
Se
ratifica el espacio como una supra categoría en cualquier análisis que implique
grupos humanos y formas de la superficie terrestre; es entonces, una entidad
dinámica que comúnmente se representa en la superficie de la tierra emergida,
pero, como producto de los significados comunicativos del signo y habla,
trasciende las fronteras de su definición tradicional como lugar palpable hacia
lugares creados comunicativamente.
El espacio
geográfico posee una amplia gama de definiciones, según la escuela de
pensamiento e historia del desarrollo de las ciencias geográfica, se asume un
tipo de definición del espacio geográfico. Ejemplo de ello lo constituye las
llamadas tradiciones geográficas representada o propuesta por teóricos como:
Eratóstenes y Ptolomeo, quienes –tradición
cosmográfica- estudiaron el espacio como un todo celeste, el objetivo era la
búsqueda de la representación cartográfica del esferoide terrestre.
Heródoto, Estrabón hasta la ilustración –escuela corológica-. El
espacio geográfico se entiende como “la ecúmene” o espacio habitado por el
hombre, así, se pasa a estudiar los espacios habitados desde sus
características ideográficas.
En la modernidad hasta la denominada postmodernidad, existe una selecta
gama geógrafos proponen modelos de investigación geográfica, en esta selecta
lista de autores se inscriben.
Carl Sauer, Richard Hartshorne, Pattison y Horacio Capel; este
último identifica seis tradiciones geográficas – síntesis histórica hasta la
actualidad de los desarrollos epistemológicos de la ciencia del espacio-,
propone las siguientes.
Una primera denominada tradición física, una segunda clasificada como corológica, la tercera como ecológica, cuarta
paisajística, quinta la espacial y la última designada como social.
En las
diferentes tradiciones existe como elemento común la concepción de espacio como
entidad localizada en la superficie terrestre, la capacidad de mutabilidad del
espacio, la agrupación de espacios por medio de escalas ya sea utilizando
criterio físicos o culturales. Por ello, se define el espacio geográfico como
una entidad supra estructural en el cual se crea, recrea y modifica
contantemente en términos físicos y culturales, la superficie terrestre.
v La noción de espacio en Tristes
trópicos
Tristes trópicos, es el resultado del trabajo
del primer trabajo de etnográfico de Lévi-Strauss en forma de exploraciones
periódicas a la región del Mato Groso en Brasil y la selva amazónica, es un de
relatos de viajes, en este sentido el texto se convierte en sí mismo en un de
diario de campo en cual se condensan las miradas y abordajes del autor en
relación con sus apreciaciones sobre el trabajo de campo necesario para
formarse como etnógrafo; solo que en palabras del mismo.
“Odio los viajes y los exploradores. Y he aquí que me dispongo a relatar
mis expediciones. Pero, ¡cuánto tiempo para decidirme!... Hace quince años que
dejé el Brasil por última vez, y desde entonces muchas veces me propuse comenzar
este libro; una especie de vergüenza y aversión siempre me lo impedía. ” (Lévi-Strauss.
1988:13).
La anterior cita, deja ver su rechazo a los
viajes de exploración -trabajo de campo o etnográfico-, es una visión personal
para sí y en sí misma, un mirarse en el espejo como persona, pero igualmente es
consciente de la importancia del mismo para el descubrimiento social
científico. Posteriormente, otra importante figura para la antropología mundial
como lo es Clifford Geertz, se refiere a la noción de espacio, en el sentido de
lugar como ¡Estar allí!, anota sobre la autoridad científica antropológica
reside en
“La habilidad de los antropólogos para hacernos tomar en serio lo que
dicen tiene menos que ver con su aspecto factual o su aire de elegancia
conceptual, que con su capacidad para convencernos de que lo que dicen es
resultado de haber podido penetrar (o, si se prefiere, haber sido penetrados por)
otras formas de vida, de haber, de uno u otro modo, realmente <<estado
allí>>” (Geertz 1997: 14).
De regreso en Tristes trópicos, aunque, el
autor se toma la libertad de expresar sus desacuerdos con el trabajo de campo,
no por ello deja de reconocer el poder de la exploración como una herramienta
necesaria en la investigación social.
Hoy, ser explorador es un
oficio; oficio que no sólo consiste, como podría creerse, en descubrir, al
término de años de estudio, hechos que permanecían desconocidos, sino en
recorrer un elevado número de kilómetros y acumular proyecciones, (Lévi-Strauss.1988:13-14).
En suma, el espacio en Tristes trópicos, se
encuentra conformado por las siguientes estructuras de significado.
1. El espacio-viaje: Son las distancias
materiales que se emplean para llegar a un lugar; o más bien, lugares de
procedencia filial ya sea un turista o investigador, hasta el nuevo lugar en el
que no pertenece, pero desea que lo acepten y poder descubrir las estructuras
simbólicas y significancia los mitos.
2. Espacio
transferido y contra-transferido: Se constituye a partir del contacto directo
con el otro u otros grupos humanos objeto de estudio etnográfico, en el
contacto directo se da el proceso de observaciones por parte de los grupos
humanos etnográfiados hacia los comportamientos sociales y hábitos culturales
de los etnógrafos, que luego de unas y meses, algunos integrantes del grupo
humano estudiado, aceptan y hasta adoptan hábitos culturales del otro, dicho
proceso psicológico se denomina transferencia.
Por el contrario la contra-transferencia es el mismo proceso de la
transferencia pero asimilado a los investigadores o etnógrafos, quienes adoptan
hábitos y en muchos casos el modo de vida de las comunidades estudiadas.
Así, la noción de espacio geográfico en
Tristes trópicos, es una categoría supra estructural que se encuentra
transversalmente presente en todo estudio social.
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Colectivo de estudios sobre territorios, espacios, etnicidad y educación